El protagonista: cartón microcorrugado
Es el material más utilizado para el envasado y embalaje debido a sus múltiples ventajas: versatilidad, resistencia, protección del contenido durante el transporte y almacenamiento, así como su naturaleza de reciclado y reciclable.
El cartón microcorrugado está formado por una estructura base cuyo eje central es de papel ondulado (onda o flute) y por otras dos capas de papel, las cuales forman la cara interna y externa de la caja. Se denomina “flute” al papel que se corruga formando una serie de S invertidas.
La altura de las ondas incide directamente en las características físicas de la caja, sobre todo en su resistencia y capacidad de estibamiento.
Otra de sus cualidades es la posibilidad de poder montarlo sobre cartulina o lyner impreso, logrando un producto de excelente calidad.
Se ha demostrado que la fibra de cartón puede reciclarse más de 25 veces, por lo que se lo considera un material de bajo impacto ambiental.